Sigo en la costa y como tengo demasiado tiempo libre porque no hago nada ni voy a ningún lado, vengo acá a escribir un par de giladas.
En realidad amo la costa, la playa es el
lugar que más paz me da en el mundo, creo que podría estar horas sentada
mirando el mar o dentro de él. No me gusta pasar muchos días acá porque amo
Capital, no soporto el pueblo y no tener a donde salir; pero muchas veces en el
año me encantaría escaparme dos o tres días a la paz que me da la costa.
Me gusta salir mucho, porque hago muchas
cosas que amo al mismo tiempo; escucho buena música, estoy con amigos y escabio
un montón (¿) No me gusta demasiado estar en mi casa por eso siempre huyo a
cualquier lado pero puedo decir que mi cama es el lugar que más adoro en el
mundo porque cuando me acuesto es el único momento en el que me olvido de todo
lo malo que pasa a mi alrededor.
No me considero una persona sin cosas buenas,
aunque no me guste o no pueda reconocerlas. Me preocupo mucho por la gente que
me importa, siempre estoy para escucharlas aunque sea en boludeces.
No sé si soy una buena persona, sin darme
cuenta soy un poco exigente y sobre todo soy intolerante, quizás me molesta muchísimo
como habla o como actúa una persona y después me doy cuenta que todo el mundo
tiene sus maneras de hablar y de actuar y que son normales y que solo a mí me
molestan. Cuando me enojo trato mal a todo el mundo, soy bastante cabeza dura.
Miento, mucho. No sé porque, simplemente
ya es una costumbre en mí, aunque sea en cosas pequeñas y sin importancia;
miento a la perfección, no existe nadie que pueda darse cuenta que estoy
diciendo la verdad y cuando no.
Me hago mucho la cabeza, con todo, aunque
sepa que mis amigas me quieren en algún momento siempre me siento abandonada,
me cuesta creer que le gusto a la gente y que no está siendo falsa conmigo. Me
cuesta muchísimo confiar en alguien, porque me encariño muy rápido con la gente
y sé que está mal, porque siempre en algún momento van a desaparecer.
Soy negativa, con todo pero especialmente
conmigo misma. Todas las noches me frustro pensando en que jamás voy a poder
dedicarme a las cosas que de verdad me gustan porque no nací con la suerte ni
con los requisitos que se necesitan para eso. Odio no poder hacer nada bien, ni
tocar un instrumento, ni dibujar ni destacarme en absolutamente nada.
Amo muchas cosas, a mis perros, la comida,
los abrazos, la música, los recitales, los besos, los abrazos, los regalos,
dormir, los abrazos las películas, leer y sobre todo los abrazos.
Pero en si odio el amor.
No sé si lo odio totalmente, simplemente
no lo soporto. No puedo ponerme feliz cuando una amiga se pone de novia, no
puedo entender a las pibas que se quejan de que no tienen uno. Le tengo terror
a eso, es un compromiso lleno de restricciones, peleas, tener que estar
pendiente de otra persona todo el tiempo y darle explicaciones por todo.
A pesar de eso, me gusta sentirme querida.
Pero me siento una mala persona, cuando
llego a una situación sentimental con alguien simplemente no sé cómo actuar,
siento impotencia, odio hacia mí misma y muchísimas ganas de llorar. Siento que
nunca voy a ser capaz de querer a una persona como esa persona me quiere a mí,
odio sentir que la voy a lastimar y me angustia le sensación de que quiero
salir corriendo lejos, para no tener que enfrentar la situación.
Me da cosa que alguien me diga
"hermosa", no sé cómo reaccionar porque en mi cabeza resulta
totalmente imposible que alguien pueda verme hermosa, ni siquiera yo.
Odio la persona que soy, el hecho de que
estoy de mal humor o deprimida todo el tiempo, que ningún día encuentro la paz
y odio la impotencia de sentir que toda mi vida va a ser igual.
Soy muy antisocial, siempre estoy con mala
cara; pero con la gente que quiero me encanta pasar el tiempo, me gusta muchísimo
salir a comer o a algún lado. Me hace feliz hacerle regalos a la gente y me
frustra mucho no tener la plata para hacerlo.
Me encantaría ser otra persona, una persona
positiva, que ama y es optimista con las cosas pero no puedo por más que lo
intente mil veces.
Seguramente siga esto en otro momento,
porque acabo de bloquearme a mí misma leyendo todo lo que escribí, otra de las
cosas que odio.